UNO
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Todo lo tenemos
somos uno con el agua
con la tierra y con
el viento.
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DOS
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Estamos aquí desde el comienzo de todo
desde el día lejano en que fueron creados nuestros primeros padres, por los
dioses protectores que les dieron el secreto del juego y el milagro de la
semilla, como herencia eterna para los hijos de los hijos.
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TRES
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El viento como una saeta cruza los oídos
del espacio y el movimiento; cobran vida los árboles, los pájaros murmuran tretas
secretas para proteger a los polluelos en
los nidos; el agua engendra peces hijos de las algas y las piedras
¿Hay acaso mayor privilegio que ser hijos de los hijos del tronco de los
primeros padres?
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CORO DE CUERVOS
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Por la mar se acercan los hijos de los
dioses, destinados a destruir a los hijos de los primeros hombres, tienen
cuerpos que se parten y la piel cubierta de pelo como coraza de fiera, son
dueños del trueno y tienen los ojos pintados de oro.
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AYAIMA
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Todos los sueños son tejidos en la luna
por dioses antiguos que todo lo saben y que están en cada lugar, sueña el
maíz con el viento y el río con la sombra de los pájaros y los adolescentes
con la fiesta de la caza y Ayaima con la muerte que ronda.
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PANAMAY
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Solo puedo soñar con el pecho fuerte de
mi señor, con su brazo cubierto de historias, con su agilidad tras el venado,
con su mirada que todo lo aclara porque carece de mentira.
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UNO
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Debemos averiguar qué hay de cierto en
esos ecos que murmuran los cuervos.
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TRES
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Hemos rescatado a los dioses perdidos en
el bosque cuando las tribus buscaban el lugar designado, hemos sellado el
pacto con los autores de todo y no pueden los dioses enviarnos la muerte en
las manos níveas de los hijos de sus entrañas ¡Preparad la fiesta llegan a
nosotros aquellos que son sangre de la sangre que dio vida a nuestra primera
sangre!
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DOS
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Tus palabras son bálsamo a mis oídos que
saben el valor de los relatos que dicen que un día vendrán los dioses a
completar la obra de los hijos de los hijos ¡Vestid el bosque de hojas de
oro! ¡Engalanad las doncellas! ¡Que se vistan los guerreros su vestido de
fiesta!
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UNO
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Sería mejor saber qué pasa.
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PANAMAY
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¿Dónde estará mi valiente? Él debería
recibir a los dioses, él que es dios entre los hombres por su porte, por su
agilidad, por su todo.
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UNO
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Decidme cuervos: ¿A qué habrán venido?
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CORO DE CUERVOS
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Ya están cerca. Ya se escuchan sus
ecos. Vienen en su cuerpo de cuatro
patas destrozando todo cuanto encuentran a su paso.
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TRES
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¡Callen! ¡Callen! Agoreros, aves de mal
encanto, pecado de algún dios carente de sentido ¿Pueden los dioses acaso
tornarse adversos con quienes guardamos los ritos? ¿¡Hay acaso entre nosotros
culpa tan grande que merezcamos el fin o el castigo? Se acercan días de paz y
el maíz tendrá vestido nuevo y una nueva voz
el viento.
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AYAIMA
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Lo huelo en el aroma del cacao que viene
cargado de olores extraños, la muerte se ha vestido de antorcha y de su risa
destila resina, todo es oscuro y solo ceniza hay en torno mío.
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PANAMAY
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¿Dónde estará mi guerrero, su pecho
cubierto de sudor y el pelo negro jugando al viento?
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CORO DE CUERVOS
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Se escuchan ya sus voces maldiciendo a
los dioses. Más que sus hijos parecen sus enemigos. Marchemos lejos que en
todas partes crece el maíz y siempre habrá un lugar en paz donde esconderse.
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UNO
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¡Se acercan!
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DOS
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¡Se acercan!
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TRES
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Pronto vamos a recibir el mensaje y la
historia de los primeros tiempos.
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VISITANTE UNO
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¡Allí están los malditos!
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VISITANTE DOS
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¡A ellos! ¡A ellos!
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AYAIMA
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Todo está oscuro como en la primera noche
de los primeros tiempos. Todo está oscuro y solo se oyen las voces malditas.
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VISITANTE TRES
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¡Creed en Dios! ¡Creed en Dios!
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VISITANTE DOS
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Tomad el oro y las mujeres y matad a
todos los hombres o mejor mandadlos a las minas y a cultivar los campos ahora nuestros en
nombre del rey y en nombre de Dios.
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VISITANTE TRES
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Creed en Dios, en Él está el camino para
ser eternos. Creed en Dios. Él será
vuestra esperanza cuando comiencen a apretar las cadenas que hoy les traemos.
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VISITANTE UNO
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¡Fuego, hierro y látigo! Es la palabra de nuestro rey y de nuestro
Dios y de nuestra gana.
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AYAIMA
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Todo es oscuro. No se escuchan ya los
gritos de los hombres de mi raza, víctimas de los hijos de aquellos dioses
que, en el camino de todos los comienzos, les dieron con barro y maíz el
secreto oculto tras el vuelo de la vida; todo es oscuro y pasarán siglos
antes que haya luz en nuestras reinos del maíz, del viento y del hombre
libre.
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miércoles, 15 de junio de 2016
LA LEYENDA DE LOS HIJOS DE LOS HIJOS
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