SENTIRSE VIVO

Sentirse vivo es asomar la cabeza
por las ventanas abiertas del hombre
y mirar hacia todas las cosas
sin sentirnos atados a ellas

Sentirse vivo
es jugar con las sombras fugaces
de las nubes en las montañas
es observar cómo crece la hierba
y van las piedras cambiando
de lugar y de forma

Sentirse vivo
es transformarse en agua
en viento
en simple ecos dando vueltas a la vida
es no sentirse más grande
que ser alguno ni ser tan pequeño
como un dios olvidado

Sentirse vivo
es hacerse dueño de la alegría
por el sólo hecho de derrotar la tristeza
y no sentirse triste
de la victoria de la alegría

Sentirse vivo
es estrecharse en el recuerdo
con un deliro en las pupilas
que no lo acaben las distancias
ni los silencios
es tomarte como un pan de cada día
y remontar contigo
los senderos ocultos del universo.